24 agosto, 2018 | SuperConsejos
Los gastos siguen subiendo y ¡qué horror! nada te alcanza. Así que un día sacas tu tarjeta de crédito para comprarte esa televisión a 12 meses sin intereses o ese nuevo celular para que tus fotos de Instagram tengan ese pixel extra. Y en ese tarjetazo ¡bum! se abre tu buró de crédito.
El buró de crédito es como un expediente médico, en el cual se registran el historial de tus préstamos y finanzas. Ahí se muestra qué sí has pagado y qué no y en cuánto tiempo.
Muy sencillo. Imagínate que un amigo te pide prestado mil pesos. ¿Se los prestarías? Pues depende, si confías en que tu amigo te los va a regresar quizá le digas que sí, pero si ese amigo siempre te queda mal, quizá le digas que mejor en otra ocasión. Algo así es la función del buró de crédito, es como un Burn Book de las empresas financieras para saber a qué personas les pueden prestar dinero y cuáles no.
Lo que hacen las empresas antes de prestarte dinero es ver tu historial. De esa manera ellos deciden si eres ese amigo confiable que sí les va a regresar el dinero o ese que, meh, no tanto. Es decir, la empresa es quien decide si autorizarte o no el pago. El buró, es solo un expediente con tu información financiera. Y no se elimina cuando dejas de pagar, ya que siempre está recopilando tu información.
El buró de crédito te asigna una calificación. Puedes ver tu número una vez al año, pero si lo quieres ver más de una vez necesitas pagar.
Menos de 500 es un mal buró de crédito. Pero, no te preocupes, nadie puede ver tu buró sin tu autorización.
Siempre y cuando seas una persona que ha pagado todo a tiempo, no tienes de qué preocuparte. Tendrás un buró de crédito limpio.
En SuperTasas.com te ofrecemos la maneras más rápida de pagar tu tarjetas para que tengas un buró de crédito limpio y puedas tener ese departamento o ese celular que tanto te urge para tu pixel extra.